Cronobiología o… La lejana historia del tiempo

En  primeros tiempos del mundo, cuando el hombre, y la mujer vivían en las cavernas, ya reconocían la diferencia entre el día y la noche, invierno y el verano… y sabían a qué hora encender el fuego temprano en el invierno y las horas de descanso y de juegos en el verano… muchos siglos después apareció el reloj. khronos, es una palabra griega que significa tiempo y de la que derivan cronómetro y también cronobiología, que es el estudio del tiempo.

Todos los seres vivos, incluso las plantas, tienen su propio reloj, un reloj interno que regula el organismo y e impide que se alteren los distintos ritmos relacionados con la rotación de nuestro planeta. Este reloj depende del ciclo noche/oscuridad-día/luz, producido por la rotación de nuestro planeta. La luz y la oscuridad marcaron nuestra vida desde el principio: el ritmo es controlado por relojes genéticos que residen en nuestro organismo y que nos indican lo que tienen que hacer los órganos. Cuanto mejor interpretemos la información que nos envían más beneficios obtendremos. Esta conexión es importante en prevención y tratamiento de enfermedades, y en el mantenimiento de la salud del individuo. Recién en el siglo XX se iniciaron las investigaciones científicas sobre la Cronobiología, gracias a los estudios realizados en Europa. 

Los tres ciclos básicos de la Cronobiología

En la cronobiología encontramos tres distintos ritmos:

1- Los Infradianos: reloj biológico (o interno) de los seres vivos que controla sus ritmos biológicos. En latín “infra” significa “debajo” y “dies”, significa “días”), son ritmos que duran más de 24 horas. Estos ritmos se repiten a intervalos de días, semanas, meses e incluso una vez al año: una oscilación dura más de 24 horas. Un ejemplo de ello son los ritmos estacionales, como la migración de las aves o los ritmos lunares que siguen las fases de la luna (unos 29,5 días). Incluso los ritmos impredecibles, los ritmos que no tienen correspondencia en el medioambiente, como el ciclo reproductivo de las mujeres, se consideran ritmos Infradianos.

2- los ritmos Ultradianos (del latín “ultra”, que significa “más allá” y “dies”, relacionado con “día”) son ritmos que duran menos de 24 horas. Muchas funciones fisiológicas del hombre se corresponden con este ritmo que tienen ciclos múltiples en un día. Los ritmos ultradianos regulan funciones físicas, emotivas y espirituales; puede durar varias horas: como el tiempo de comida, la circulación de la sangre, las secreciones hormonales, diferentes fases del sueño, etc.

Estos procesos pueden cumplirse en el organismo en millones de formas…algunas en pocos segundos, como el control de la respiración; otros hasta milésimas de segundo, como muchos procesos que se producen en las células del sistema microcirculatorio. 

3- Los ritmos Circadianos (del latín “circa”, que significa “alrededor de”, y “dies”, de “día”): estos ritmos duran aproximadamente 24 horas. 

Por ejemplo: el ciclo sueño-vigilia de los seres humanos, el movimiento de las hojas de ciertos árboles o el abrirse de las flores de la mimosa a la mañana con la luz del sol y cerrarse por la noche, cuando se oculta.  Muchos de los efectos de los ritmos circadianos afectan directa e inmediatamente a los seres humanos; por eso son los más estudiados.

La Cronobiología es una ciencia en rápida expansión en todo el mundo. Los médicos, los investigadores y también la población en general están empezando a reconocer que, la elección del “momento correcto” para administrar una medicación o para entrenarse en determinado deporte puede marcar la diferencia este es el principio fundamental de la Cronobiología.

Hoy en día la Cronobiología ya se utiliza en estudios de genética, endocrinología, ecología, medicina del deporte y psicología.

La CronoFarmacología es una rama de la Cronobiología especialmente estudiada en lo que se refiere al mejor horario para la toma de medicamentos o suplementos que puede reducir los efectos secundarios, mejorar la eficacia del órgano o de la enfermedad a la que están destinados o llegar a interrumpir un proceso fisiológico.

Muchos institutos médicos reconocidos están trabajando en el tema y añadido departamentos, laboratorios y programas de investigación centrados en el estudio de la Cronobiología, dándole la importancia que tiene el conocimiento de nuestros ritmos biológicos naturales. 

En este momento, las áreas de mayor interés en la investigación son: la melatonina, llamada “la hormona madre de la Cronobiología” porque fue una de las primeras en estudiarse por los problemas que ocasionaba el “jet-lag”- la descompensación horaria por viajar contra-reloj- los efectos de la luz sobre algunas enfermedades y el fenómeno de los “cronotipos”, que son distintos en cada persona.El cronotipo es la predisposición de cada persona a experimentar picos de energía o de momentos de descanso, según la hora del día, que es distinto según cada persona. Aunque la Cronobiología es considerada una ciencia relativamente joven, sus posibilidades de aplicación son infinitas. Los métodos de investigación se están perfeccionando cada vez más, con el objetivo de que se convierta en una disciplina científica reconocida.

Dra. Elba Albertinazzi
Asoc. Arg. de Médicos Naturistas
www.aamenat.org.ar 

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