El cuidado de la salud periodontal debe ser parte esencial de los cuidados del deportista ¿Sabías que las bebidas deportivas son las principales responsables de la mala salud periodontal en los atletas y que esta, a su vez, es responsable de muchas bajas por infecciones, lesiones, desgarros o bajo rendimiento por calambres? ¡El cuidado de la boca es parte del entrenamiento!
¿Puede una infección causar una lesión?
En los deportes altamente competitivos no solo observamos bajas por lesiones, sino que en muchos casos, estas son superadas por aquellas producidas por procesos infecciosos (gripe, gastroenteritis…), incluso una caries puede predisponerte a calambres e impedir un buen desempeño.
Es un hecho que los deportistas que no cuidan su salud e higiene bucal, también están dando ventaja; así lo han verificado al menos con futbolistas de ocho equipos de Inglaterra y Gales, entre los que se encuentra el Manchester United.
Los futbolistas profesionales se han prestado para que un grupo de dentistas estudiara sus bocas para conocer su estado y el resultado fue que “una mayoría aplastante de los jugadores tiene problemas serios en las encías (77% con gingivitis, 80% con periodontitis irreversible), casi cuatro de cada diez sufría caries activa en el momento del examen y más de la mitad una erosión dental.
El panorama es increíble pues no es que únicamente se trate de deportistas de élite para los que la salud debería ser prioritaria, disponiendo además recursos para sostener las mejores opciones para el bienestar, sino también como un descuido inexplicable de sus clubes que, disponiendo costosos cuerpos de asesores, abandonan a atletas que les generan fortunas, ya sea por negligencia o por desconocimiento”.
El estudio realizado en la University College de Londres (UCL) y publicado en el 2015 en una revista de referencia en medicina deportiva como la British Journal of Sports Medicine, reveló que: el 45% de los 187 jugadores estudiados aseguró encontrarse molesto con su salud bucal; el 20% admitió que el estado de su boca tiene un impacto negativo en su calidad de vida; el 7% aseguró que les perjudica a la hora de entrenar o jugar al fútbol.
Más allá de estos datos subjetivos, los especialistas señalan que este estado de cosas impacta negativamente en el estado físico más allá de lo que puedan identificar los propios jugadores.
El responsable del estudio, Ian Needleman, afirmó: «La mala salud oral afecta a la calidad de vida y al bienestar de los jugadores.»
Agregando luego que esto puede incluir infecciones catastróficas y abscesos, dolor de grado menor y sensibilidad que afecte a la calidad del sueño y la alimentación, asuntos esenciales para un deportista de élite.
Estudios anteriores
En otros estudios anteriores se ha observado el vínculo entre la salud y la higiene periodontal en relación a la integridad cardiovascular y la carencia de Coenzima Q10; personalmente, amén de los adecuados cuidados de la boca, yo recomendaría que todo deportista profesional con gran despliegue físico consuma un complemento de Coenzima Q10 en forma de ubiquinona o ubiquinol, de esta manera se asegura un refuerzo antioxidante, estimula el metabolismo mitocondrial, fortalece la resiliencia de su corazón y auspicia un mejor rendimiento. Pero eso es tema para otro artículo…
Hoy día se comprende mejor el vínculo entre la alimentación y el estilo de vida en relación a los procesos inflamatorios del cuerpo, aunque este es un aspecto aún muy descuidado; al respecto el especialista anteriormente mencionado agregó: «Está bien documentado científicamente que estas enfermedades orales, especialmente las de las encías, y las infecciones bucales pueden provocar inflamación en el resto del cuerpo.»
Y un dato sorprendente: los jugadores sufren estos problemas por encima de la media de la población siendo aproximadamente el 40% de los futbolistas los que tienen caries y la mitad padecen desgaste dental. ¿Cuál sería el principal sospechoso junto a los malos hábitos alimentarios? La acidez de las bebidas deportivas, aseguran los investigadores.
Unos años antes, había sido el F.B. Barcelona, quienes enfatizaron en la salud bucal de sus jugadores; era el 2003 y el club contaba en su plantilla con Ronaldhino, Reiziger, Puyol, el Conejo Saviola y ya venían pidiendo minutos Xavi, Iniesta y Messi.
Entonces, los 30 jugadores de la plantilla profesional se sometieron a un control periodontal durante tres años; los responsables del estudio fueron un grupo de expertos del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge y los galenos del Barça, Ricard Pruna y Joan Ardèvol,
quienes en su momento afirmaron: “Los altos niveles de rendimiento requeridos para un jugador de fútbol sólo pueden alcanzarse por un individuo totalmente sano.”
Y también señalaban la importancia de proteger la inversión y el esfuerzo del club y de los jugadores dándole especial importancia a la boca: “El tiempo, esfuerzo y dinero invertido en el logro de este máximo nivel de rendimiento no se debe poner en riesgo con problemas de salud bucal.”
Los investigadores no establecieron un vínculo causa-efecto preciso pero cuantificaron una clara correlació entre el índice de problemas bucales de los jugadores y sus lesiones musculares de origen desconocido.
Según explica el Dr. Cosme Gay-Escoda, responsable del estudio: “Una buena higiene dental es decisiva en el deporte y una simple infección en la boca, que pasa al torrente sanguíneo, debilita seriamente los músculos del futbolista”.
Quizás el caso más grave sea el que le costó la vida al escolta estadounidense del Internacional-Santos de baloncesto, Laurence Young, fallecido en el 2011 a consecuencia de una enfermedad bacteriana originada en una infección bucal.
En esos tiempos, jugadores como Malouda, Gerrard y Van Persie buscaron en la salud de su boca la solución a sus molestias físicas; este último, Cesc Fàbregas, José Antonio Reyes, el checo Rosicky, el francés Abou Diaby o Tony Adams se han quitado las muelas de juicio por consejo del Dr. Philippe Boixel, osteópata con amplia trayectoria en el mundo futbolístico.
El estudio del F.C. Barcelona encontró también que solo el 50% de los jugadores acudía con regularidad al dentista, de los 30, únicamente 18 se cepillaban los dientes dos veces al día, tan solo 4 de ellos utilizaban hilo dental y como media padecían 2,2 caries por jugador.
Otro problema es el bruxismo, una tendencia a apretar y rechinar los dientes mientras se duerme que generalmente se le achaca al estrés en la medicina convencional pero que ante todo, en la naturopatía alimentaria consideramos entre la etiología a los parásitos, las cándidas y los desequilibrios de la microbiota; para esta referencia, un tercio de la plantilla del Barça sufría bruxismo y dos tercios del plantel (por encima de la media habitual de la población) presentaban un problema importante de maloclusión (dientes están mal alineados que no encajan los superiores con los inferiores).
“Para respirar bien tengo que tener toda la boca abierta y me canso antes. Cuando era niño, mi madre se empeñaba en que me pusiera aparato y tenía que haberla hecho caso” declaró Ronaldhino Gaucho.
Cuidados naturales
Además de las visitas al odontólogo, en medicina natural vamos un poco más allá con las medidas de higiene cotidiana. En primer lugar, por supuesto, evitamos las pastas dentales comerciales cargadas de azúcares simples, edulcorantes sintéticos, colorantes o conservantes, optando por versiones naturales de cuidada elaboración; también podemos utilizar en su lugar aceite de coco, que además de tener propiedades antiinfecciosas, aporta valor nutricional.
Otra alternativa que suma es el oil pulling, un beneficioso enjuague bucal con aceites de buena calidad. Normalmente se realiza en ayunas y consiste en tomar una cucharada de aceite de coco o sésamo y mantenerlo en la boca moviendo el aceite por toda la cavidad bucal no menos de 5 y hasta 30 minutos; hay que hacerlo pasar a conciencia entre los dientes y procurar el contacto con todos los espacios. ¡Además es una excelente meditación!
El bicarbonato de sodio también puede ser útil para preparar un excelente enjuague bucal; se añade una cucharadita a la mitad de un vaso de agua y con ello enjuagamos la boca.
Los enjuagues con infusiones de caléndula, malva o salvia, o de la tintura de equinácea diluida en agua, tienen propiedades astringentes, antiinflamatorias y hemostáticas y su uso nos puede ayudar a prevenir y bajar la inflamación, así como a frenar el sangrado.
Para enjuagues bucales también podemos utilizar algunos aceites esenciales como tea tree o eucalipto, del mismo modo -siempre siguiendo instrucciones del fabricante y asegurándonos que sean de calidad alimentaria-, podemos recurrir a una o dos gotas para masajear las encías y prevenir el retroceso de las mismas<
Bibliografía:
– La periodontitis reduce el rendimiento deportivo
– Las manos mágicas de Boixel
– Las muelas picadas del Barça
– Más caries, menos gole
Pablo de la Iglesia
Naturópata
@poreldespertar
www.coachnutricional.net
Coautor del libro «Estimula tu inmunidad natural» (Kepler)