En tiempos donde la búsqueda de una salud natural gana cada vez más espacio a nivel mundial, les propongo redescubrir el valor de dos productos nobles: el coco y el aceite de orégano. Les cuento por qué son verdaderos aliados para fortalecer nuestro bienestar de manera integral.
El legado del coco: energía y equilibrio
El aceite de coco prensado en frío, utilizado desde la tradición ayurvédica en prácticas como el oil pulling (enjuague bucal con aceite), es mucho más que un recurso de higiene oral. Sus propiedades antibacterianas contribuyen a prevenir la gingivitis, mejorar la microbiota bucal y aportar frescura natural.
Pero sus beneficios van más allá: rico en ácido láurico, este aceite ofrece efectos antibacterianos, antivirales y antifúngicos, reforzando el sistema inmunológico y favoreciendo la digestión. También brinda energía al cerebro, cuida la piel y el cabello, y se integra fácilmente a distintos estilos de vida como el vegano, keto o paleo.
Los triglicéridos de cadena media (MCT), presentes en el aceite de coco, se han convertido en un suplemento moderno, valorado por su rápida absorción y su capacidad para proveer energía inmediata, optimizar la función mitocondrial y favorecer la salud metabólica. Una fuente natural de vitalidad que acompaña el ritmo actual sin perder su raíz ancestral.
El aceite de orégano: defensa y purificación
El orégano, conocido en nuestras cocinas, encierra un tesoro medicinal que la ciencia natural ha revalorizado. Su aceite concentrado es un potente antimicrobiano y antioxidante, capaz de combatir bacterias, hongos y parásitos. Se lo recomienda para fortalecer las defensas, mejorar la salud digestiva y aliviar afecciones respiratorias.
Además, su uso se extiende a problemas cutáneos como el acné y la candidiasis, gracias a sus propiedades antiinflamatorias y purificadoras. Un suplemento sencillo pero eficaz, que trabaja desde adentro para reforzar el equilibrio interno.
Un solo camino: el natural
El coco y el orégano, tan simples y virtuosos, nos recuerdan que los recursos más valiosos los encontramos en la naturaleza. Consumir productos naturales no es una moda pasajera, sino una necesidad urgente. Elegir productos nobles y libres de químicos es un acto de amor propio y de respeto por el cuerpo; una invitación a vivir con más energía, más defensas y, sobre todo, con más conciencia.
Los saluda como siempre….
Por Beatriz Prodan
Dist. Beatriz Cosméticos, Celíacos y Complementos Alimentarios
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