Sus alcances en el tratamiento del dolor
y regeneración muscular
Hace unos años un prestigioso médico rural tuvo curiosidad sobre el funcionamiento de la homeopatía. Observaba a muchos pacientes suyos que mejoraban de sus problemas crónicos utilizando está medicina, mientras leía en las revistas médicas convencionales que la homeopatía no tenía evidencia científica y era algo inexistente. Como buen científico, antes de emitir una opinión se puso a estudiar, se inscribió en un curso de posgrado, comenzó a utilizar el método y los medicamentos, y se sorprendió sobre los efectos logrados. Publicó un libro llamado “Homeopatía: Ficción o Realidad” donde describió sus dudas e investigaciones y luego publicó un segundo libro llamado “Homeopatía: Realidad” donde profundiza sobre lo aprendido. A todos los que ingresamos en este mundo, que está muy difundido, pero es poco conocido nos pasó algo semejante cuando comenzamos a estudiar. No es fácil de entender al comienzo cuando te dicen que se usa café diluido para tratar el insomnio o estricnina para curar cierto tipo de epilepsia. Cuando sabés que los medicamentos están diluidos millones de veces y por lo tanto carecen de efecto químico. Leyendo un reportaje a un gran filósofo de comienzos del siglo XX: Bertrand Russell dando consejos para ser leídos 100 años después, nos dice:
“Cuando estés considerando cualquier hecho o filosofía, tienes que preguntarte ¿Cuáles son los hechos? ¿Cuál es la verdad que los hechos te revelan? Nunca te dejes desviar, ya sea por lo que deseas creer o por lo que te traería beneficio si así fuera creído. Observa única e indudablemente cuales son los hechos.”
Los hechos en homeopatía cuando uno comienza a utilizarla correctamente tal vez vayan contra la lógica que uno maneja, pero los hechos son los hechos y la realidad es que funciona maravillosamente. Los perros, gatos, caballos, vacas, pollos, cerdos etc que he tratado con homeopatía en su mayoría se curan o mejoran lo suficiente para tener una buena calidad de vida. Los medicamentos que no tienen acción química, que están diluidos millones de veces tienen efecto. Actúan sobre el organismo estimulándolo para lograr la reacción de este que llevará a la mejoría. Según se lee en el Diccionario Médico Dorland en la definición de Ciencia: “Observación sistemática de fenómenos naturales con el fin de descubrir las leyes que los rigen. Conjunto de conocimientos acumulados de esta manera”. Samuel Hahnemann un médico alemán a fines del siglo XVIII observó que la intoxicación con una sustancia llamada China Officinalis producía síntomas muy parecidos a los de una enfermedad, el paludismo que se curaba con la misma China Officinallis. Este fenómeno natural observado por Hahnemann se basaba en una ley de la naturaleza que se llama Ley de Semejanza. “Similia Similibus Curentur” Todos los medicamentos curan las enfermedades cuyos síntomas se aproximan lo más posible a los producidos por ellos. Un ejemplo de ello es la cebolla. Cuando uno pica cebolla, se intoxica con cebolla, tiene lagrimeo, agua por la nariz, irritación de los ojos y vías respiratorias etc. Síntomas muy semejantes a los del resfrío. Pues el Allium Cepa que es la Cebolla diluida y dinamizada es un excelente remedio para el resfrío con estas características. Pero el maestro no se quedó sólo con esto. Sino que tuvo que experimentar para comprobar que lo que pasaba con la China también pasaba con otras sustancias. Así que en 1790 (importante tener en cuenta el año) utilizó un método de doble ciego para probar cuales son los efectos que producían diferentes sustancias en hombres sanos. Un grupo recibía la sustancia y otro solo agua. Nadie sabía quién recibía que cosa y luego se analizaban los efectos producidos consumiendo estas sustancias durante un mes o más. Como los medicamentos de la época eran muy tóxicos: Mercurio, Fósforo, Arsénico, fueron diluidos muchas veces para atenuar su efecto tóxico y energizados con sacudidas en cada pasaje de dilución (dinamización). Así fue como se fue creando un banco de síntomas provocados por diferentes sustancias. Es lo que se llama Materia Médica Pura. Hoy en día se han experimentado miles de sustancias y esta Materia Medica tiene 12 tomos de cientos de páginas cada uno. Mientras la medicina oficial científica creía en la generación espontánea, utilizaba sangrías, ventosas, purgantes como tratamientos o las llamadas pócimas que tenían cientos de ingredientes, Hahnemann utilizó pruebas a doble ciego para experimentar cada sustancia y determinar cuáles eran sus síntomas producidos para luego saber cuándo utilizarlas al encontrar algo semejante en un enfermo. Muchos años antes de Pasteur o de Claude Bernard, los padres de la medicina científica. Ley de Semejanza, Medicamento diluidos y dinamizado, Experimentación en hombre sano, son las bases de una especialización de la medicina llamada homeopatía que es tan científica como cualquier otra y que los veterinarios tomamos del uso en seres humanos y lo llevamos a los animales para mejorar su calidad de vida.
Hasta la próxima
Salud y Alegria.
Por Jorge S. Muñoz. Veterinario homeópata.