El origen del ataque de pánico.

Cómo persona que ha sufrido «ataques de pánico», puedo decir hoy, después de años de trabajo e investigación, que los agradezco. Hoy puedo abrazar esa experiencia sin miedo, ya que me he permitido experimentarlos a consciencia.  Vivirlos como el viaje de retorno a casa, a mi centro, a la plena conexión con mi Alma, sabiendo desde la comprensión, que es otra lección más para aprender en esta escuela de vida. Aprender a ser feliz y vivir en paz, implica que hay un mínimo porcentaje dónde aún, lo sufro…Y que jamás deja de pasar, porque todo el rato estamos aprendiendo y evolucionando. 

Hace 22 años atrás aconteció el primer episodio. Estaba en casa, tranquila, escribiendo un reporte laboral y de la nada me salí del cuerpo. Entré en pánico, no podía respirar, el corazón a mil por hora, sentía electricidad en todo mi cuerpo, y la mente repleta de pensamientos, emociones. Miedo.

Quería salir corriendo, me temblaba el cuerpo, pero sentí que se abrían infinitos canales de comunicación con el Todo. Ya está- me dije. Me muero. 

Concurrí al psiquiatra y lo único que él hizo, fue medicarme. Aprendí a vivir con miedo al miedo.

Hice mucha terapia y a los seis meses que ya había logrado llevar una vida “normal”. Al psicólogo, le pregunté: cuándo me van a quitar la medicación (Clonazepán), no quería depender de una pastilla para vivir. Él me contestó: “Jamás, los ataques de pánico son la única enfermedad de la mente que tiene cura, pero que se desconoce el origen”.

Llegué a casa y me replanteé mi vida. 

Como una “auto terapia” todos los días me ponía desafíos. Trataba de llegar de una orilla a otra con cada brazada; aprender a tomar el autobús otra vez, animarme a salir con amigas, hacer deporte etc. Me daba vergüenza. A veces me iba peor y otras mejor. 

Fui aprendiendo de cada síntoma, cada uno revelaba un despertar de consciencia, cada día yo era más fuerte, más libre, más feliz, más auténtica. Fui creando técnicas muy simples para pasar el momento que me dejaron como lección la importancia de la quietud y meditación. “Hacer sin esfuerzo y jamás dejar de accionar” (como enseña el Tao) y tener fe en mí misma, si lograba salir de esto, después podría ayudar a otros.

El amor en acción es la medicina y lección.

Un día, estaba ya viviendo en Paz y ayudando a gente que era mi sueño. 

Con el tiempo me di cuenta de que los síntomas estaban ahí… la diferencia es que los estaba disfrutando. Este es el desafío más interesante de mi vida.

Podemos vivir este viaje como una transformación hacia nuestro bienestar y agradecer que esto nos sucede. Es un proceso que duele, pero dejamos de ser quien éramos para convertirnos en quienes queremos ser.

Hoy te acompaño a encontrar el origen del Ataque de Pánico, a transitarlo y renacer a una nueva conciencia. 

Los invito a hacer trabajo de introspección de «‘ Intronomia». EL ARTE DE VIVIR EN PAZ.

Por Ana Gaist

Intronomia – Biointronomia

Sesiones y entrenamientos- duración 1 mes. 

Una revolución interna para lograr una evolución consciente

Por Ana Gaist
Coach y conferencista

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio