Comienza el otoño, y algo en nuestras narices y gargantas empieza a descontrolarse. Inequívocamente arranca la temporada alta de enfermedades respiratorias. Consultamos al Dr. Andres Bertorello*, neumólogo, para saber cómo prevenirlas y tratarlas.
CA: Resfríos, gripes, toses, broncoespasmo… ¿en los últimos años nos enfermamos más?
AB: Sí, con el advenimiento del uso del aire acondicionado en todos lados, se replicó en el verano la patología otoñal, hay muchas bronquitis, neumonitis, virosis respiratorias que aparecen en el verano que antes no estaban. Lo que pasa es que entra aire fresco a la vía aérea y entra por la boca, no por la nariz y ese aire que entra fresco a la boca trae algunos gérmenes que desencadena que se tengan cuadros respiratorios. Los cambios de temperatura bruscos, la humedad, hacen que los pacientes salgan desabrigados, entonces cae la temperatura 20º de golpe, eso hace que el pulmón reciba aire fresco y pueda hacer un broncoespasmo. En otros casos, en ambientes cerrados, se contagian las personas entre sí, es muy común en un colegio, en un geriátrico, en el hospital mismo, es que la cohabitación de gente en espacios cerrados o mal ventilados condiciona al desarrollo de enfermedades.
CA: ¿Como podemos prevenir enfermedades respiratorias?
AB: La prevención se da con el no fumar, con el salir abrigado a la mañana, las mujeres deben salir a la calle con el pelo seco, no con el pelo húmedo. En algunos casos está indicada la vacuna de la gripe, la vacuna de la neumonía. Beber mucho jugo de naranja que tiene mucha vitamina C o jugo de pomelo, que eso es un mecanismo defensivo natural.
Y repito: No fumar
CA: Se han hecho, hasta hace unos años campañas para prevenir y detectar, la EPOC. ¿Tiene relación directa con el consumo del tabaco?
AB: EPOC es un término -en inglés se llama COPD – es Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica. Y sí, es una enfermedad que tienen los pacientes en relación al uso del tabaco, con una disposición a tener enfermedades en el pulmón, que se manifiestan de dos formas: como bronquitis crónica – el paciente que expectora todos los días, en especial a la mañana, síntoma consecutivo al hábito de fumar – y el enfisema, que es otra parte del EPOC, que hace que a partir de los 45/50 años comience con dificultad para respirar, con disnea – la percepción de que falta el oxígeno -. Corre la persona, por ejemplo jugando al tenis, y se fatiga, le falta el aire, eso es la EPOC. Es una enfermedad previsible, porque ¡si no fuma no va a tener EPOC!
CA: ¿Qué pasa con los “fumadores Pasivos”
AB: Bueno, hay un grupo de pacientes que convive con fumadores que tienen lo que se llama el “tabaquismo pasivo”. En un ámbito cerrado, la mujer no fuma, el hombre fuma; en el ámbito cotidiano de cada tres cigarrillos que fuma el fumador, un tercio se lo fuma la no fumadora. Entonces hace un EPOC por tabaquismo pasivo, no era su objetivo fumar, está fumando porque fuma el marido o la pareja.
Otro ejemplo: un chico asmático que vive en un ambiente en el cual hay humo de tabaco. Eso es perjudicial para su asma. Su asma se puede empeorar por el hábito de fumar de los padres.
CA: ¿Hay muchos casos de EPOC en Argentina?
AB: Un 14% de la gente de la argentina tiene EPOC, y el problema de esto es que la mayoría están sub diagnosticados, es decir, tienen EPOC y no están diagnosticados. Eso agranda los costos, porque un paciente que no está diagnosticado con una enfermedad va a generar mayor demanda. Si ya estuviese diagnosticado lo medicás, le indicás primero que no fume y el paciente va a tener una mejor evolución. Son enfermedades previsibles. Lo importante es el diagnostico precoz.
CA: ¿Se pueden diferenciar las enfermedades respiratorias de las simples gripes o las gripes no son tan simples?
AB: El problema es que cuando la gente comienza con un cuadro de fiebre, malestar general, cansancio, que se llama astenia, dolor de cuerpo, comienza con moco generalmente clarito -se contagian varios en el colegio o en el trabajo.
Cambia, ¿el moco es verde? Automáticamente el paciente va a la farmacia y se compra un antibiótico. Si es una gripe, es un cuadro viral que tiene una remisión espontánea en cuatro a seis días: reposo, ibuprofeno, si hay temperatura paracetamol, jugo de naranja y punto se cura. Si tiene muchos síntomas se le pueden dar antiestamínicos, jarabe para la tos. Pero ¿qué hace la gente? Toma antibióticos, son de venta libre. Eso hace que se confunda el diagnóstico.
CA: Entonces nunca cortar el proceso de la gripe…
AB: Se corta sola la gripe. Una bronquitis es un cuadro distinto, tiene otra disposición. Lo que pasa muchas veces es que una gripe, si no se sigue de cerca y el cuadro se desvía, puede hacer una bronquitis, se sobre infecta. Sobre todo en algunos casos donde el moco se pone más verdoso, tiene fiebre importante, capaz que es asmático, tiene EPOC, ahí quizás sí, uno puede pensar es un cuadro gripal que se sobre infectó con una bacteria y tengo que dar antibiótico. Pero lo tiene que decir el médico, no el paciente.
El Dr. Andrés es muy generoso con sus respuestas y nos queda material en «el tintero», pero para la próxima edición.
Cecilia Andrada / CONVIVIR
*El Dr. Andres Bertorello, es neumonólogo actual vicepresidente de la Sociedad Argentina Respiratoria ( hasta el 2 /11/2018, cuando asumirá el cargo de Presidente electo de la Asoc.). Se desempeña como médico de planta en el prestigioso hospital Argerich de la ciudad de Buenos Aires.