Coronavirus y cuidado de adultos mayores

Los investigadores encontraron que los adultos mayores son más susceptibles a las enfermedades crónicas como las respiratorias y las cardiovasculares, la diabetes y las de sistema nervioso. 

¿Por qué sucede esto? 

Al igual que ocurre con todos los seres vivos, con el paso del tiempo hay un proceso de desgaste o envejecimiento, y vamos perdiendo distintas capacidades: una de ellas es la posibilidad de defensa del organismo ante amenazas internas y externas, entre las que figuran los virus y las bacterias y se alteran y disminuyen las funciones de protección.

Los procesos de envejecimiento comienzan alrededor de los 65-70 años y dependen en parte de los genes, pero también la calidad de vida de cada persona: el estrés, la alimentación, el ejercicio físico condicionan el mantenimiento de esos procesos…pero en algunos casos pueden revertirlos.

Por eso vamos a compartir algunas propuestas para conservar o recuperar un sistema inmune adecuado.

La alimentación, lo que comemos, es lo más sencillo para incorporar, y tiene más capacidad de adaptación, ya que podemos reemplazar los alimentos que no nos gustan, o su preparación, o su cocción.

Lo más importante es que sea un alimento, un producto que tenga nutrientes verdaderos, evitando los que tienen agregado de químicos, que se reconocen en las etiquetas por la terminación  “antes” o porque se usan letras y números para nombrarlos: colorantes, saborizantes, etc.

Para conseguir comidas-alimentos podemos recurrir a dietéticas y casas de comidas naturales que pueden aconsejarnos sobre las características de cada preparación.

También es importante dedicar un tiempo a cuidar nuestro cuerpo: tenemos la capacidad de movernos y estimular los músculos, huesos y articulaciones: NO  nos quedemos sentados en un sillón: piensen que cuando terminemos con  la cuarentena vamos a tener que caminar…así que pongamos un horario para comenzar con 10 minutos de ejercicio físico,  lo más sencillo y natural es caminar, aunque sea en el patio o la terraza o en el interior si hace mucho frío: si mejoramos la circulación de la sangre con  el movimiento vamos a estimular también su llegada y la del oxígeno que transporta al cerebro… y todos queremos tener un cerebro sano!!

Saludar al sol todos los días en que aparezca: los rayos solares sobre la piel permiten aumentar la vitamina D en forma natural, para mejorar el Sistema inmune de defensa: siempre que sea posible colocar la piel blanca del antebrazo en un lugar donde pueda recibirlos directamente durante 15 minutos, alrededor del mediodía, cuando son más potentes.

Dormir y descansar lo necesario: como estamos en casa, quizás no tengamos horario para dormir, pero nos ayuda crear una rutina: cenar temprano -20hs- comer liviano: sopas de verdura con 2 cucharadas de aceite y un huevo. 

Comer 1 barrita de chocolate oscuro con 60-70% de cacao aporta triptófano, un aminoácido esencial que estimula la secreción de serotonina, melatonina y vitamina B3 en la glándula pineal, que regula el ciclo sueño-vigilia!!

Acostarse a las 22 hs, NO tener TV, ni celular, ni radio en la habitación, acostarse y apagar todas las luces, colocarse en una posición cómoda.

Puede hacer algún ejercicio de respiración profunda o colocar 2-3 gotas de aceite esencial de lavanda en un pañuelo o trozo de tela de hilo o algodón entre la funda y la almohada para favorecer la relajación y el sueño.

Dra. Elba Albertinazzi
Asoc. Arg. de Médicos Naturistas

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