Los 4 acuerdos

Este libro, escrito por el Dr. Miguel Ruiz, autor mexicano, hijo de padre Tolteca y madre curandera, es un best seller que dio la vuelta al mundo despertando interés en todo tipo de culturas.

El autor dice que hemos sido domesticados de pequeños, como se hace con un gato o con un perro, para obedecer al “sistema” y permanecer en un estado de sueño y así desperdiciar lo que realmente somos para ser masificados y transformarnos en “animales” de consumo.

Adentrándose en la esencia del libro, explica que en el proceso de domesticación al que fuimos sometidos, primero por nuestros padres, luego por la sociedad a través de la escuela y finalmente por el sistema social, tenemos una idea falsa de quienes realmente somos.

Descubrir esto significa entender que pensamos y reaccionamos en la sociedad atados a acuerdos que nos fueron impuestos y que no nos dejan ser libres porque forman parte de nosotros. Porque sin ser conscientes obedecemos a patrones que nos alejan de la verdad y nos hacen esclavos de nosotros mismos.

Mi abuela, con sus refranes decía: “No hay ciego más grande que aquel que no quiere ver, ni sordo más necio que aquel que no quiere oír”.

A medida que crecemos vamos aceptando por imitación o por creencia falsos acuerdos que poco a poco nos someten. Carlos Castaneda dice: “La idea de ‘los brujos’ es que estamos sepultados por nuestra educación social, engañados con percibir al mundo como un lugar de objetos sólidos y finalidades. Vamos hacia nuestras tumbas negando que somos seres mágicos; nuestra prioridad es servir al ego en vez de al espíritu. Y antes de que nos demos cuenta, la batalla ha terminado – morimos miserablemente encadenados a nosotros mismos.”

En la sabiduría Tolteca este mundo es ilusorio y solo “despertando” del estado de sueño podemos conocer la realidad y ser felices, objetivo de nuestra existencia. Para empezar por el principio debemos aceptar que hemos hecho acuerdos y que es posible revocarlos reemplazándolos por otros acuerdos que nos lleven por el camino de la libertad sacándonos de la “domesticación”. Estos acuerdos que propone el libro son cuatro:

• 1er. Acuerdo: Sé impecable con tus palabras.

Las palabras son acciones y tienen poder sobre nosotros y sobre los demás, por lo tanto deben ser precisas ya que inducen a la acción y si son ambiguas lo único que crean es confusión, indecisión y caos.

Miguel Ruiz da un ejemplo muy claro de esto; se trata de una mujer que de niña tenía vocación para el canto y que ya adulta por más que se lo había propuesto no podía cantar a pesar de ir a los mejores maestros. Pues bien, esta frustración se debía a que cuando era pequeña, su madre que llegaba de trabajar, tenía un gran dolor de cabeza y ella, que permanentemente cantaba, recibió un reto para hacerla callar, le dijo: “no cantes más porque tienes una voz horrible y no te soporto”. Ella obedeció y no cantó nunca más, había hecho un acuerdo equivocado con la persona que más quería; su madre.

• 2do. Acuerdo: No tomes nada personalmente.

Cuantas veces juzgamos a los demás pensando que las cosas las hacen solo para perjudicarnos y tomamos represalias o nos amargamos inevitablemente creyendo que somos el centro del universo. Entonces creamos falsos acuerdos que obedecemos solo por cosas que afectan nuestro ego y terminamos siendo infelices y desdichados por nada.

• 3er. Acuerdo: No hagas suposiciones

Frente a algo que nos parece haber escuchado o haber visto hacemos suposiciones y actuamos en consecuencia creando falsas expectativas sobre los hechos. La ancestral sabiduría de la Kabahla Hebrea dice: “nuestros cinco sentidos nos engañan” y obramos como si fuéramos dueños de la verdad, cuando en realidad todo lo que hacemos es actuar acorde a nuestras suposiciones equivocándonos y generando dolor.

• 4to. Acuerdo: Siempre da lo mejor de ti.

Cada acción que logres hacer debe ser hecha con maestría, como si fuera lo último que hacer sobre la tierra, como si fuera tu obra maestra. Actúa lo mejor que puedas, no hagas a los demás lo que no te gustaría que te hagan a ti.                                                                     En Japón se educa a la gente para que si encuentras algo que no es tuyo, eso debe ser de “alguien” y no como solemos decir: “yo lo vi primero”. Se honesto y la vida te sonreirá.

Cosas tan simples como los 4 acuerdos pueden cambiar nuestra vida.ensamiento”, dicen las Sagradas Escrituras.

Es Creer o Reventar.

Ing. Guillermo Marino Cramer
Autor del libro: «Crónica de un viaje a lo desconocido”
Email: skyjetar@gmail.com
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