El 38% de los asesinatos de mujeres en el mundo no se debe a robos callejeros, o situaciones de guerra, no: son perpetrados por su pareja o expareja, una cifra «alarmante», según la Organización Mundial de la Salud (OMS). El primer estudio global sobre la violencia física o sexual contra la población femenina elaborado por este organismo revela que un tercio de las mujeres de todo el mundo ha sufrido o sufrirá violencia a manos de su compañero sentimental en algún momento de su vida.
La OMS define la violencia física o sexual contra la población femenina como «un problema de salud pública de proporciones epidémicas». El informe Estimaciones mundiales y regionales de la violencia contra la mujer: prevalencia y efectos de la violencia conyugal y de la violencia sexual no conyugal en la salud —publicado por la OMS en colaboración con la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres y el Consejo de Investigación Médica de Sudáfrica— determina que el 35,6% de las mujeres ha sufrido agresiones a manos de su pareja o de alguien que no es su pareja —en algunas zonas, como el continente africano, esta cifra se eleva al 45,6%—. En su mayor parte, son casos de violencia machista. Es significativo que el 29,4% de las chicas de entre 15 y 19 años haya sido maltratada por su compañero o excompañero sentimental, lo cual refleja que este problema se inicia muy pronto en las relaciones de pareja.
Pero el informe no solo se centra en este tipo de violencia, sino que también refleja las agresiones sexuales a las mujeres a manos de otras personas. El 7,2% de la población femenina ha sufrido esto en algún momento de su vida. Llama la atención que, según el estudio, el porcentaje sea mayor en los países desarrollados (12,6%) que en regiones como el Sudeste asiático (4,9%) o el Pacífico occidental (6,8%). La OMS aclara, sin embargo, que en estas últimas zonas la violencia sexual sigue estigmatizada, por lo que muchas mujeres no se atreven a denunciar estas agresiones, ya que se sienten avergonzadas e incluso culpables. Los autores de la investigación reclaman más estudios sobre la violencia fuera del seno de la pareja. «Necesitamos que más países midan este tipo de violencia y estudien los mejores instrumentos de medición que estén disponibles», expone el doctor Naeemah Abrahams, del Consejo de Investigación Médica de Sudáfrica.
Hay que tener en cuenta que las cifras que ofrece este estudio se obtienen de comparar países donde no siempre se contabilizan estas agresiones con el mismo rigor o se usan sistemas diferentes.
Los efectos de la violencia en la salud
El estudio menciona las muchas enfermedades o padecimientos asociados a estas agresiones, como la mayor probabilidad de dar a luz a bebés por debajo del peso recomendado, de padecer una depresión, de tener problemas con el alcohol o sufrir un aborto; además aumentan los contagios de enfermedades de transmisión sexual.
El porcentaje de hombres muertos a manos de sus parejas, un 6%, contrasta con el caso contrario, el de mujeres que son víctimas mortales de sus compañeros sentimentales: un 38%. En algunas regiones, como el Sudeste asiático, más de la mitad de los crímenes contra mujeres (el 55%) son cometidos por sus cónyuges.
Los autores del informe remarcan la importancia de que por primera vez se haya realizado una revisión sistemática y una síntesis de datos científicos a nivel global y regional sobre la prevalencia de estas dos formas de violencia contra la mujer. El estudio anima a reforzar los esfuerzos para prevenir las agresiones y concienciar a la población y hace hincapié en la necesidad de mejorar la asistencia a las víctimas de violencia.
El País