Argentina el País del Revés -2da. parte

Un año bisagra donde «lo que está al revés» busca su equilibrio

En nuestra entrega anterior, desandamos las «inversiones» astrológicas de la carta natal argentina, esa peculiar configuración que nos hace sentir que vivimos en el «país del revés». Donde aquello que el sentido común nos dicta, no sucede y sucede justamente a la inversa.  Hoy, con la Revolución Solar 2025 ya encima, (9 de julio) veremos cómo esas contradicciones se intensifican y, a la vez, nos empujan a un cambio profundo.

 La Revolución Acuariana.
Ya hablamos de nuestra Casa 2 en Escorpio, esa que nos condena a una economía de crisis, deuda y transformación. También mencionamos a Urano natal en Sagitario, que nos trajo disrupciones económicas vinculadas a lo global, a esas explosiones de optimismo que terminan en caídas. Es la contradicción de querer volar alto financieramente, pero con una base inestable y poco sólida, basada en dogmas.
Ahora, en la Revolución Solar 2025, Urano se muda a Géminis y se instala en la Casa 3, la de la comunicación, la vecindad, el transporte y el flujo de información. La disrupción no vendrá tanto de los grandes movimientos financieros internacionales, sino de cambios rápidos e inesperados en la forma en que manejamos la información y el comercio y cómo se percibe en la comunidad. Nuevas tecnologías de pago, cambios en la logística de ventas y la desinformación como arma que puede sacudir los mercados.
Esta energía «geminiana» de Urano genera una tensión con nuestro Júpiter natal en Escorpio. Habrá necesidad de ajuste constante, entre las innovaciones en la comunicación y el cómo manejamos nuestros recursos. La velocidad de las noticias y la forma en que se comparte la información, desestabilizarán aún más las finanzas. Preparémonos para una economía movida por la velocidad y los giros inesperados en la toma de decisiones. La economía exigirá un cambio profundo y nuevas reglas de juego.

El Eco del 2001 y la toma de consciencia
En 2001, Argentina vivió una de sus crisis más devastadoras y de toma de conciencia. Astrológicamente, ese fue un momento clave: nuestro Sol Progresado (la evolución del propósito nacional) llegó a la Luna natal en Capricornio (el sentir del pueblo, su demanda de estructura). El propósito de la nación chocó de frente con la dura realidad y el hartazgo de la gente. Fue un punto de inflexión, de «¡basta!». Hoy los astros señalan: el líder indiscutible es el pueblo y ningún dirigente estará a la altura, y solo el pueblo encontrará la solución.
En 2025, la Revolución Solar parece «invertir» nuestra carta natal de una manera muy simbólica. (la Luna y el Sol invierten posiciones por casa). Es como si este año el universo le dijera al liderazgo político, económico, científico y religioso: «¡Ahora les toca a ustedes sentir el rigor de las exigencias para sobrevivir!». Las elites dirigentes se verán forzadas a asumir la responsabilidad y la austeridad que históricamente el pueblo ha demandado. 
La base del país, el hogar y la familia, volverá a las raíces cancerianas de protección y pertenencia. Esta inversión augura un año donde los dirigentes sentirán una intensa presión para madurar y demostrar que pueden estar a la altura de las circunstancias y muchos deberán cambiar o serán reemplazados, condenados al olvido. 

Dirigencia vs. Pueblo:
El MC (Medio cielo) de la RS en Capricornio en conjunción con la Luna natal pone el foco en la capacidad de los dirigentes y funcionarios para gestionar y dar estabilidad. Si la gente percibe falta de responsabilidad o corrupción, el descontento se manifestará. La imagen del liderazgo estará ligada a la capacidad de generar «orden» y «solidez». Esta «inversión» de ejes, sumada a otras energías, crea un caldo de cultivo para fuertes tensiones, que se manifestarán en la arena política, religiosa, mediática y social. 
Mientras tanto, el FC (Fondo del cielo) de la RS en Cáncer con el Sol natal hará que el gobierno apele a los sentimientos de unidad y patria. Pero si esas palabras no vienen acompañadas de hechos concretos, la frustración será mayúscula. El factor más explosivo es la presencia de Plutón retrógrado en Acuario en la Casa 10 (MC) de la Revolución Solar. Plutón es el planeta de la transformación radical y el poder. En el MC, indica una reestructuración profunda del liderazgo y las bases de poder, que puede llevar a un cambio radical y cultural. Esta energía acuariana de Plutón anuncia el fin de ciertas formas de hacer política y el nacimiento de otras. Los partidos tradicionales sentirán la presión para adaptarse o desaparecer. 
Podríamos ver fusiones, escisiones o el surgimiento de nuevas fuerzas que representen mejor los ideales del cambio radical y la participación colectiva. La innovación en la forma de gobernar será un tema central de la transformación social. Este cambio se extenderá también en el resto de las organizaciones populares. El proceso no será fácil. Plutón es un planeta de destrucción creativa; habrá resistencia, conflicto y crisis. Pero esta «revolución acuariana será muy argentina» es una oportunidad para reinventar nuestra estructura de poder y sentar las bases para un futuro más resiliente y equitativo. 
El camino será arduo, pero la promesa es la de un país más auténtico y coherente con su verdadera esencia. El Estado, tal como lo conocemos, está siendo empujado a una metamorfosis. Plutón en Acuario apunta a una estructura más justa, equitativa y que sirva al colectivo. Podría implicar una descentralización del poder, mayor participación ciudadana o la incorporación de tecnologías que transformen la administración.
El ser argentino (asc. en Aries) necesita una patria, (Cáncer casa 4) volver al origen fundante, a las familias y a los migrantes, al comercio prosperó, pero la lucha por la propia identidad o la pérdida de territorios, queda para un próximo artículo.

Por Astrólogo Ángel Conde
iagconde@gmail.com

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