Cuando comienzan los días más largos y soleados del verano, lo asociamos naturalmente con las vacaciones, con el calor, con la necesidad de bebidas que el organismo nos pide a los hombres y a los animales, e incluso a los vegetales… a las plantas que vemos sufriendo en el balcón… Según un principio de la Medicina Ayurveda “lo similar aumenta lo similar”, ¡y en esos días de calor no se nos ocurre pensar en un abrigo ni en una bebida caliente… solo en un vaso de agua con hielo!! Sabemos por experiencia que el clima influye en el organismo y buscamos frutas y verduras livianas y refrescantes, que no exijan un trabajo pesado de digestión al organismo. La Medicina Ayuveda clasifica a los alimentos por sus cualidades: pesado- liviano, frio-caliente entre otras propiedades) y lo tendremos en cuenta para indicarlos según el clima que estamos viviendo.
Ante un clima cálido, es mejor incorporar bebidas sencillas, caseras y refrescantes, que nos protegen de la deshidratación: por ejemplo, al salir para el trabajo dejar en la heladera una jarra con agua filtrada, a la que se agregan hojas de menta recién cortadas y el jugo de un limón, y si lo desean, una cucharadita de azúcar mascabo para darnos energía, y calmar la sed al llegar a casa… o llevarla en un termo al trabajo.
Otras opciones son las infusiones frías de manzanilla y melisa -tiene un sabor
alimonado que refresca- y/o semillas de hinojo o de anís pasados por el mortero o molidos, o las aguas saborizadas con trozos de frutas variadas: durazno y ciruelas; naranja y limón exprimidos, y si son orgánicas, incluir la ralladura de las cáscaras; o semillas aplastadas de cardamomo y pimienta negra, que le dan un suave sabor picante y estimulante… O el agua de coco preparada con coco rallado que se consigue en dietéticas. Es mejor tomar estas bebidas antes de las comidas, porque también ayudan a la digestión.
Lassi la bebida…
Lassi es una bebida usada en el norte de la India, en los días de mucho calor: es refrescante y calmante para el sistema digestivo y se prepara con una base de yogur orgánico, al que se agregan especias, si se desea salado; o frutas, en el caso de preferirlo dulce.
Las proporciones para elaborarlo son:
4 tazas de yogur natural/orgánico,
2 tazas de agua fría,
2 cucharadas de comino o cúrcuma, o alguna fruta de estación,
1 cucharada de sal marina –no usar si tiene problemas cardíacos o renales!!
½ taza de hojas de menta, o 1 cucharada sopera de semillas de anís recién molidas.
Preparación: licuar, llevar a la heladera y agregar más hojas de menta.
Siempre aconsejamos no tomar las bebidas recién sacadas de la heladera durante las comidas porque disminuye el fuego digestivo y se enlentece la digestión<
4BONUS TRACK: Tisanas de uso diario
Los preparados herbales tienen la ventaja de aportar agua y también los principios activos que contienen las plantas, que pueden utilizarse para mejorar la función de diversos órganos.
Para preparar tisanas o infusiones se coloca una cucharada de té de la mezcla por taza de agua, se lleva a punto de hervor y se apaga el fuego; es aconsejable tapar el recipiente y dejar reposar unos cinco minutos para que los principios activos y el sabor se liberen y pasen al agua. Luego de ese tiempo se cuela y puede beberse caliente o fría. Si se desea puede endulzarse con una pequeña cantidad de miel. Otra forma es echar directamente el agua apunto de hervor sobre la hierba, tapar y seguir el procedimiento anterior.
Tisana estimulante de la función hepática y pancreática: diente de león, cardo mariano y celidonia en partes iguales.
Tisana estimulante de la función renal o diurética: barba de choclo y marrubio en partes iguales; cola de caballo, la mitad de la medida.
Tisana digestiva: manzanilla, poleo y melisa en partes iguales.
Para evitar gases: machaque en el mortero media cucharadita de semillas de anís y una de angélica, y cúbralas con agua bien caliente.
Por Dra. Elba Albertinazzi y Dra Lilian Diaz
Asoc. Arg. de Médicos Naturistas
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